Musica triste en esta noche banada de estrellas.
Dedos volando sobre teclas blancas dejan oir un lamento puro e inexorable.
Y solo me echo a volar en cielos de recuerdos,
Y empiezo de nuevo a vivir una vida inagotable.
Me deslizo suavemente en la mente de mi amada,
Suave piel lechosa acariciada por una hermosa cabellera,
Y una pequena boca entreabierta que deja salir suspiros al ritmo de la melancolica melodia que baila al compas de un alma rota.
Oh amada mia, no pares tu sonata que arana este corazon mio.
Deja que tu cabello dance sin parar y tu cuerpo se estremezca con cada nota al sonar.
Deja que admire lo sublime de tu ser,
Y sentir que este mundo de recuerdos es permanente y que el tiempo es mi aliado.
Melodias banadas en tristeza y dolor se asoman en la habitacion,
Y las manos sobre las teclas parecen volar al lento ritmo.
Mi amada solloza lagrimas cristalinas como gotas de lluvia,
Y su cuerpo se estremece al sonar de las teclas.
Y de nuevo vuelo en cielos llenos de recuerdos, tan tangibles parecieran ser,
Y lamento el no poder secar sus lagrimas,
El no poder unir los pedazos de su alma,
Y de no atrapar los suspiros que salen de sus labios y ahogarlos en mi boca con un beso eterno...
Los palpitos de su corazon caen al ritmo de la lenta sonata,
Su rostro tan hermoso como rosa blanca se contrae en expresion de dolor,
Y ya los recuerdos no representan una vida inagotable,
Y se transforman en dagas que atraviesan mi alma.
Oh amada mia, mis manos desean tocarte y mis labios secar tus lagrimas,
Pero este irrefrenable dolor e inexistencia me alejan del tiempo mas tuyo que mio,
Y no hago mas que vagar y sumergirme en lo que una vez existio.
La lenta melodia cobra vida,
Y su cuerpo echado sobre el piano esta
Rizos rojos cubren sus palidas mejillas
y su blanco cuerpo no deja ya pasar el tiempo,
sus labios, rojos ya no dan ese suspiro,
y sus manos inertes descansan ya del viaje sobre teclas
que daban vida a esa melodia de un alma rota
20.05.2009
Rafael Quintero
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